sábado, 12 de abril de 2008

Internet sin cables

De aquí a unos días esperemos que acabe la relación que había con ONO y que duraba ya varios años. Tras llamar varias veces y ver cómo denegaban a los clientes las ofertas que no sólo daban a los nuevos sino que por sentido común también debían poderse aplicar, ha hecho falta que mi hermano quisiera conectarse a internet desde la PlayStation sin cables y que diera la casualidad de que Tele2 tuviera una oferta que permitiera el cambio sin tener que pagar una barbaridad.

Cierto es que la baja con ONO puede ser todavía conflictiva y cierto es también que la relación con Tele2 también puede llegar a serlo. Ya sabemos cómo funciona en España el mundo de las telecomunicaciones. Sin embargo por ahora estoy razonablemente contento. A ver, razonablemente contento del servicio, y del precio y de la comodidad. No estoy tan contento con cómo dejó el instalador las cosas porque como comenté, tuve que ponerme yo a terminarlo pero bueno. Pero eso afortunadamente pude hacerlo yo sin esperar a que algunos de los amigos de mi hermano viniera por aquí un día que pudieran. Total se trataba de poner un microfiltro que además venía en la caja.

Y en el lado de las comodidades está el que te regalaban el router inalámbrico mientras que según recuerdo, mi hermano comentó que ONO cobraba cerca de 100 euros por proporcionar uno. Y todavía más cómodo que eso es que ahora los dos ordenadores están conectados con internet y no hay cables por ahí en medio. Bueno, sí que hay cables y gordos, los de ONO, pero esos habrá que quitarlos el día que haya que pintar :-). Y creo que la última comodidad es la de ver la factura en línea, cosa que no sé si se podía hacer con ONO, pero lo que es seguro es que con Tele2 sí se puede.

Ahora ya lo que queda es que en el trabajo también nos podamos deshacer de los cables :-).

Y además, unas cuantas lecciones aprendidas. La primera es que la IP interna del router puede ir cambiando y vas a necesitar redirigir los puertos. Lección grande donde las haya :-D. La segunda es que al menos en mi caso con wifi se ha mostrado exactamente igual de rápido que con cable. Ciertamente que no tan rápido como el máximo anunciado, pero tampoco era esperable y esta velocidad es bastante aceptable. Y la tercera lección aprendida es que las empresas tienen sus normas de funcionamiento y sólo te van a ofrecer alguna mejora en el momento en que pidas la baja. Pero bueno, ésas son las reglas así que a pedir la baja tocará.

Un saludo, Domingo.

1 comentario:

Toni Solano dijo...

Efectivamente, gracias a la incompetencia de los instaladores (a mi casa vino un jovencito que debía ser primerizo en todos los aspectos técnicos y al que tuve que ayudar incluso a pasar el cable), se aprende un montón.