lunes, 28 de abril de 2008

Clasificando gente

Clasificando gente, clasificando gente ... léase al son de aquella canción de Mecano que decía: Bailando salsa, bailando salsa. Eso es lo que nos va a tocar en los próximos días en el trabajo, clasificar gente ... en buena, mala y regular. Por si no fuera suficiente con las actividades burocráticas, ahora tocará (cierto es que a unos más que a otros) velar armas para entrar en combate cuantas veces sea necesario en la defensa (o no) de la gente que ha trabajado contigo. En mi caso se trata del primer año que participo y poco he tardado en corroborar lo que imaginaba, las salas de reunión se convierten en un zoco donde se compran y se venden títulos de buenos o malos trabajadores, títulos que a la postre valdrán su peso en subida de sueldo.

Y el problema es que probablemente no puede ser de otra forma. Eso sí, no dejo de mantener lo que mantenía hace ya 7 años cuando apenas sabía cómo iba esto, sólo sabía que de ese proceso dependía mi subida de sueldo, la de los demás y en parte la satisfacción de los diferentes equipos. Y lo que mantenía no era sino que el hecho de que sea un proceso extremadamente complejo donde invariablemente se van a producir injusticias, no debería suponer ningún obstáculo a que se deba intentar mejorarlo. Recuerdo que en aquel tiempo, no se sabe muy bien cómo, probablemente sólo por desconocimiento, personas comprometidas y trabajadoras tuvieron una subida de sueldo inferior a personas que habían entrado hacía muy poco y que aunque en un primer momento pudieron parecer prometedoras (si no, no se explica), al final resultaron ser toda una decepción.

Ignoro si desde entonces se han puesto muchas medidas en práctica para mejorar la situación. Alguna sí, me consta, pero no sé si serán suficientes. De todas formas sí que reconozco que ahora sé algo que antes no sabía y es que desde fuera se puede tener una idea aceptablemente buena de cómo trabaja la gente. Creo que lo comentaba hace no mucho, a colación de algún otro asunto relacionado con la empresa. Eso sí, que conste que he dicho "aceptablemente". Todavía recuerdo uno de los casos de entonces cuando una analista me decía de una persona ... "es que a tal se le ve que siempre mantiene la calma" y yo contestaba: "Es que si encima no la mantuviera entonces ya ..."

Porque hay gente y seguro que yo para según qué cosas también, que engaña. En particular dar una imagen de calma no tiene por qué corresponderse con dominar la situación. Aunque por supuesto que siempre es mejor que no dominar la situación y tampoco mantener la calma :-).

Volviendo al asunto que nos ocupa, ¿cómo lo haces para decirle a alguien bueno, malo o regular, no por sus méritos sino porque tiene que haber un determinado porcentaje?. Por si esto fuera poco, hay que tener en cuenta cosas la evolución anterior, cómo estés con respecto a otras personas de tu categoría que lleven más o menos tiempo que tú, si alguna de las personas con las que "compites" tiene opciones de subir de categoría etc.

Y por supuesto esto que te toca a ti decidir (o ayudar a ello) con otros, pasa contigo. Y además pasa peor conforme se va subiendo en la escala ya que teóricamente hasta ahí es hasta donde ha llegado la gente más valiosa y de repente te toca decirle a una de esas personas que este año la china le ha tocado a él. Para se sincero, no creo que este año la china me toque a mí. Sin embargo, es obvio que le acabará tocando a alguien. Y no sólo eso, sino que también es obvio que llegado el momento me acabará tocando a mí. Eso sí, esperemos que tarde :-D.

Un saludo, Domingo.

No hay comentarios: